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RADIO CELESTE, por Pedro Pérez Linero

RADIO CELESTE, por Pedro Pérez Linero

MESAS ELECTORALES

 

A raíz de haber sido convocado para formar parte de una mesa electoral el próximo día 7 (cita a la que no puedo acudir por residir actualmente en Escocia), he estado bicheando un poco por Internet y me he encontrado, entre otras cosas, con el interesante caso de Francisco J. Cuevas, un anarquista jerezano que en 2004, viéndose obligado a formar parte de una mesa electoral, se presentó a ella con una camiseta en la que rezaba el siguiente texto: "En democracia; estoy aquí en contra de mi voluntad y bajo amenaza de ir a la cárcel. CNT". Francisco fue detenido y juzgado por ello. Yo he recibido exactamente la misma amenaza. Si la Junta Electoral desestimara mi justificación para no participar, estoy expuesto a multa, que de no ser pagada, parece ser que me llevaría al talego durante un mes, por niño malo y desobediente, cuando la realidad es que no puedo y no hay más cera que la que arde.

El caso es que tres años más tarde, en 2007, Francisco fue convocado nuevamente. En esa ocasión se declaró objetor de conciencia, objeción que fue rechazada.

Y algunos de ustedes se preguntarán, ¿objetor de conciencia? Pues sí, objetor de conciencia. Obligar a un anarquista a formar parte de una mesa electoral atenta contra sus principios; es como si a un católico convencido de los dictados de la Iglesia le obligan a distribuir condones en el tercer mundo, le duele sólo con pensarlo.

Me gustaría que se hiciesen una idea de lo que el temita suponía para él, para Francisco. No les pido que compartan su opinión (eso es cosa de cada cual), sino sólamente que lleven a cabo un pequeño ejercicio de empatía. Al tratarse de un anarquista, votar en unas elecciones va en contra de sus principios pues, según su ideología, está en desacuerdo con el sistema electoral. Por lo tanto, lo coherente, desde su punto de vista, es no participar en ellas. Si rechaza la sóla idea de acudir a las urnas, imagínense lo que puede suponer que, además, le obliguen a formar parte de una mesa electoral, o sea, a formar parte activamente del sistema con el que no comulga y contra el que además, lucha desde su posición ideológica.

Con todo esto quiero llegar a dos cuestiones.

La primera es que al Estado, con tal de mantener su tinglado en pie, le importa más bien poco o nada los principios ideológicos de las personas, es totalmente ajeno a sus sentimientos. Para mantener ese modelo al que denominan cínicamente "democrático", se recurre a la represión. Es lo que han hecho siempre todos los sistemas políticos, fuesen del color que fuesen, pero a mi entender, en el caso de la democracia, esta práctica resulta más grave aun.

Si a mí me obligan a hacer algo en contra de mi voluntad durante un régimen fulanista, lo puedo entender (que no justificar) porque, al fin y al cabo, estos regímenes son así y no es ningún secreto para nadie. En ellos no hay hipocresía, los cojones del General Fulano sobre la mesa pesan, eso es lo que hay, todo el mundo sabe a qué atenerse y punto en boca. Ahora bien, que a un ciudadano le obliguen a algo que va en contra de sus ideas, bajo amenaza de cárcel, dentro de un sistema democrático que se vanagloria de respetar las diferentes ideologías, me parece, además de una clara muestra de despotismo, una falta de vergüenza descomunal que atenta contra los principios, no sólo del individuo, sino de la propia democracia. La democracia se traiciona a sí misma, muere, se autodesintegra, se suicida con este tipo de leyes represoras.

La segunda cuestión es por qué el Estado ha tenido que llegar a tomar estas medidas. Desde mi punto de vista, es sencillamente porque el Estado da por hecho que la población es políticamente irresponsable. Es consciente de que los ciudadanos ya no creen en el sistema electoral y que cada vez pasan más de él, siendo creciente la tendencia a evitar la participación, bien por motivos ideológicos, bien por pereza (lo que abunda bastante en nuestro país), o bien porque la gente ya esta harta de los políticos, que se han ganado a pulso el hastío de la ciudadanía a base de mentiras, corrupción y manipulaciones de todo tipo. La gente está más que cansada de que los políticos discutan acaloradamente por gilipolleces mientras la casa sigue por barrer, y las verdaderas necesidades de la población por cubrir.

Si los ciudadanos en general nos identificáramos con el sistema, si tuviéramos fe en él y realmente lo consideráramos un patrimonio digno de nuestra involucración, no sería necesario recurrir a las amenazas como si fuéramos unos críos, ya que los voluntarios saldrían de debajo de las piedras.

Lo triste es que, a pesar del progresivo crecimiento de la apatía general hacia el sistema electoral, el Estado no se plantea medidas que lo mejoren, que lo hagan más transparente y justo para así recuperar el entusiasmo de una población a fecha de hoy desencantada, sino que recurre a lo más directo y fácil, o sea, a medidas más propias de una dictadura. Siempre es más fácil extorsionar que hacer autocrítica e intentar mejorar. Por lo tanto, no me extrañaría nada que si las cosas siguiesen el curso que han tomado, el día que los mandamases viesen que ya no vota ni el que inventó la urna, impusiesen también el voto obligatorio, como tristemente ya sucede en otros países. Ahora, eso sí, lo harían por nuestro bien, por el bien de la democracia y por nuestra libertad. Esta se haría más fuerte, y la mentira en la cual vivimos, también.

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4 comentarios

Niti -

Conozco a Paco Cuevas y tenía noticias de lo que le ocurrió. Es una gran putada que tengas que hacer algo con lo que estás en contra totalmente por ideología.A mi me jode y mucho.
En el instituto donde trabajo a un compañero mío de curro, lo obligaron a trasponer hasta Miranda de Ebro (Burgos) para participar en una mesa electoral. Intentó apelar al juez de turno, pero nada, no hubo comprensión, y encima los gastos de desplazamiento, partieron de su bolsillo y no de Papá Estado. Muy bonita la democracia, sí señor.

Pedrin -

Yo, personalmente, si en vez de en Escocia me hubiese pillado en mi tierra, no hubiera tenido inconveniente en participar. Aunque no estoy de acuerdo con el modelo electoral, tampoco hubiera sentido que traicionaba mi conciencia. Hubiera hecho el paripe como lo hago en mas asuntos, y tampoco me hubiera pasado nada. Yo voto o no voto, dependiendo del contexto en el que se desenvuelvan las elecciones, no tengo un posicionamiento cerrado. Lo que pasa es que, entre otras muchas cosas, me jode el sistema de recuento de votos y adjudicacion de escanyos porque veo que miles y miles de papeletas van directamente a la basura y no cuentan absolutamente para nada.

De todos modos, me pongo del lado de aquellos que sinceramente sienten que participar atenta contra sus principios y se sienten mal por tener que hacer algo que va en contra de su voluntad. Por eso escribi el articulo.

Adol -

Pues mira, a mí me han llamado para el domingo 7 (Colegio de Brihuega-Guadalajara), escribí un recurso diciendo que objetaba de conciencia y claro, me han dicho que en esta democracia el obligar a participar en ella es lo que prima, así que a pringar. Pienso ir con una camiseta escrita diciendo lo mismo que Francisco, aunque si me permite por el plagio, no lo firmaré con CNT. ¿hasta cuando tiene que haber esto? Se objetaba pa' a mili, para los jueces populares, ahora para el aborto....No entiendo ¿no será que hay gato encerrado aquí?

Ana Mari -

La verdad es que llevas razón. A mí me llamaron en las últimas elecciones de suplente, que no se yo qué es peor, porque me tuvieron todo el día en Arcos por si uno de las mesas se ponía malo, y no vi ni un duro. Vale que no trabajé como los de las mesas pero me "obligaron" (quizás debería escribirlo sin comillas) a permanecer disponible y cerca todo el día bajo amenaza de multa y cárcel, por supuesto. Si tanto les gustan las elecciones que se pongan los políticos en las mesas ¿no? Son los primeros que no dan ejemplo. A mí esto es que me repatea.
Por cierto, otro ejemplo de lo bien que nos trata el Estado es que aún no me han resuelto la beca para un curso de inglés en el extranjero y el plazo para reservarlo en las escuelas acaba el 1 de junio... Obviamente muchísima gente la rechazará por falta de tiempo para los trámites, pero luego dirán que han dado 25000 becas cuando han CONCEDIDO 25000 pero DADO muchas menos. En fin...