Una postal desde Lisboa
Ahí tienes la Luna, a medio hacer y entre constelaciones, con Júpiter un poco más arriba. Llevo no sé cuánto tiempo contemplándola -"contemplar", y no otro, es el verbo apropiado-. Estoy sentado casi a ras de suelo en una terraza desde la que se divisa parte de la ciudad. La luz de la Luna se refleja, leve, sobre el río Tajo. Y esa levedad, mágica y cautivadora desde mi infancia, me acoge serena y me lleva a otros mundos, como siempre ha sido.
Pedrín
4 comentarios
Ana Mari -
erpereh -
Espero que lo hayas disfrutado.
Julian Candon -
Me parece estar viéndola contigo... Es muy xuuuuuula!!!
Angel -