Iron Maiden, una banda de Heavy Metal (6)
EVOLUCIÓN MUSICAL
Aunque a lo largo de la discografía de Iron Maiden podemos asistir a una evolución musical de más de dos décadas, lo cierto es que dicha evolución se debe más bien a la madurez personal de los miembros del grupo que a la inquietud de éstos por cambiar y experimentar. Iron Maiden es un grupo musicalmente conservador, si bien es cierto que en los años ochenta no fue exactamente así.
Los primeros discos son muy frescos, con canciones por lo general directas, sencillas y para nada exentas de virtuosismo.
Después, entre los años 1982 y 1985, asistimos al período más creativo de la banda, con pérdida de crudeza, canciones más complejas y depuradas, pero sin faltar tampoco temas directos y con estribillos pegadizos (himnos).
Durante este tiempo Iron Maiden desarrolla sus señas de identidad, como son, por ejemplo, las guitarras dobladas, que consiste básicamente en dos guitarras haciendo un mismo solo simultáneamente, pero sonando una más aguda que otra. Otra seña de identidad es el sonido del bajo, que en ocasiones suena como si estuviese galopando.
La mayor concesión a la experimentación llega durante la segunda mitad de los ochenta, cuando introducen teclados y sintetizadores por primera vez, aunque su uso desde entonces, exceptuando alguna que otra canción, siempre ha sido muy discreto. En este período de experimentación cabe destacar especialmente el álbum “Seventh Son Of A Seventh Son”(1988), único álbum totalmente conceptual de la banda, o sea, disco en el que todas las canciones giran en torno a un mismo concepto.
En la última década, la música de Iron Maiden se ha depurado aún más, suena mucho más limpia, sin abandonar las señas de identidad anteriormente mencionadas. Pero por lo general abundan temas de mayor duración, con introducciones y cierres lentos y muy melódicos, y aunque dichos temas poseen siempre una parte central totalmente heavy, la impresión que causa en el oyente es la de que la banda se está ablandando. Sin embargo, la calidad musical sigue primando, aunque no tanto así la imaginación.
En lo que se refiere a la temática de las letras, hay de todo, aunque cabría destacar las letras épicas, ya sean históricas, mitológicas o novelescas, que impregnan los discos de la banda durante los años ochenta. Ya en los noventa, las letras comienzan a ser más líricas, personales, o tratan temas más cercanos a la condición humana como puedan ser el miedo, el dolor o la guerra.
Pedro Pérez Linero
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